Esta mozzarella se elabora con leche cruda. Esto le confiere un gran sabor y permite degustar la mozzarella de búfala en todo su esplendor organoléptico. La leche recién ordeñada se procesa directamente en la quesería, que se encuentra en un oasis verde al sur de la campiña Pontina, a unos 5 km de la costa mediterránea ya pocos kilómetros del Parque Nacional del Circeo, donde la cría de la búfala mediterránea tiene larga tradición. Esto permite obtener un producto genuino que se diferencia por su calidad. Siguiendo la política de los productores, el uso de sólo leche de búfala les permite obtener productos con un sabor inconfundible, muy agradable y delicioso.